Creo fielmente en los actos que salen del corazón, mas bien creo que deberíamos hacer mas caso a sístole y a diástole que saben mas de circulación que nosotros. ( Aunque cuando te vea decidan acelerar el pulso). Creo en los sueños, en las velas que soplamos cada vez que pasan los años. Y creo que se deberían soplar mas velas. Por eso yo siempre que enciendo un mechero soplo la llama, porque me sobran los deseos. Y adoro soplar pestañas y rogarle a la luna, que no me deje sola esta noche, que necesito de luz para escribirte.
Creo fielmente en que si una persona da todo lo que tiene por ayudar a otra, acabara recibiendo todas las cosas buenas que ha ofrecido.
Y que la vida es demasiado corta para pasarla entre llanto y frio.
Hay que llorar y hay que sentir dolor. Pero hay que saben canalizarlo, dormirlo, calmarlo.
Hay que encontrar una pequeña maldición.
La mía comenzó por dejar la pasión de lado, y olvidarme de lo que me hacia feliz. Aunque llegara un huracán de labios que te hiciera volver a sonreír.
Creo que los humanos estamos locos, y no somos conscientes de la locura. Que somos capaces de arrasar un mundo solo para que nos lo reconstruyan.
Y eso hacemos día a día, desgarramos personas, nos desgarran a nosotros. La falta de empatía.
¿Pero tu has visto su sonrisa cuando le robas un abrazo a una amiga? ¿ Cuando sale el sol y te calienta el día? ¿ Cuando regalas amor ? ( Y solo por que te apetece ).
Dicen que si no encajas en este mundo, has nacido para cambiarlo. Y hace un año comenzó mi pequeña revolución, intentando dar a conocer los sentimientos de una persona incluso mas pequeña que la revolución.
Que mi maldición sea la poesía.
Y que ojala, que ampare a los malditos y rotos, dándole una copa y una mano amiga.
Y que si no nos dejan soñar, no les dejaremos dormir.
GRACIAS.